Luna Llena en Cáncer enfrentada al Sol, Plutón, Saturno, Júpiter y Mercurio en Capricornio. Lo que se traduce a una titánica lucha de las emociones, sentimientos, instintos (la Luna) frente a la consciencia, la autoexpresión (el Sol) y también encarándose al pensamiento, la lógica (Mercurio), la Fe, el optimismo (Júpiter), las limitaciones, el control (Saturno) y el Poder, la trasmutación (Plutón). Lo que finalmente se interpreta como: lo que queremos está realmente opuesto a lo que necesitamos.
El tono dominante será la vulnerabilidad porque es una potente y mil veces recargada Luna Llena en Cáncer (el signo más emotivo del zodíaco), pero que no tendrá el típico brillo y luz de una Luna Llena, porque se oscurecerá, se Eclipsará cuando se alínee frente a la tierra y no le lleguen los rayos del Sol.
¿De qué se trata esta energía?
Nuestro mundo emocional se hace consciente, a raiz de esa gran oposición, de que necesita liberarse de algún PERO, TRABA, ESTORBO situación emotiva que te ha estado atormentando y que es imperativo desechar para poder avanzar en este camino. Es dejar ir todo lo emocional que nos estanca. Es viajar ligero de equipaje, sin cargas emocionales.
Este fenómeno astronómino nos llevará a revisar el entorno familiar porque se revelan o surgen secretos familiares, así como tomar riendas entorno a metas profesionales .
¿Cómo será la sensación?
De absoluta angustia, porque es un momento de consciencia sobre algo que sabemos tenemos que cambiar. Observaremos que nos cuesta expresar lo que sentimos y si nos comunicamos no nos entienden. Sentiremos que nos enfrentamos a limitaciones, frustaciones, conflictos emocionales, juegos de poder, incertidumbres, impotencias, controles, todo un cocktail cortesía de la oposición entre la Luna y todos los planetas que ya les mencioné y, a su vez, muy bien amenizado por un Eclipse.
¿Cómo debemos actuar?
Tranquilizarse, es una opción, porque bajo la influencia de un Eclipse (y durante toda esa semana) no será bueno tomar ninguna determinación trascendental. Les sugiero revisar, procesar, intentar buscar un equilibrio entre lo emocional y la realidad. Porque adicional a ello, ese mismo día, 10 de enero, entra Urano directo, que con sus irreverencias augura más confusiones en el ambiente; y dos días después, se dará la compleja conjunción Saturno-Plutón, que sucede cada 31/34 años. Todo ello potenciará más el Eclipse y bajo tamaña tensión nerviosa, no estamos mental ni emocionalmente firmes para cualquier decisión. Habrá que pensarla muy bien.
“Camino de Las Lunas” by DOLLY LA ROSA