Sol en Tauro

Si sientes una inusual energía que te impulsa a luchar por tus ideales y concretar todo lo que has venido trabajando en las últimas semanas, pues bienvenid@ al mes de TAURO.

Una vez que inicia el ciclo del Sol en este signo, estamos listos para sentar bases sólidas de lo que hemos estado construyendo, sobre todo aquello que se ha derrumbado. Tauro nos ayuda a frenar la impulsividad y nos permite realizar un análisis más realista y concreto de las situaciones que enfrentamos a diario, en las relaciones, en el trabajo, en las finanzas.

Con el Sol en Tauro llega una poderosa y brillante energía espiritual que nos permite actuar con libertad e independencia, para dejar atrás lo perdido y lo que nunca será, y poder enfocarnos con claridad en la plenitud y la abundancia de lo que viene.

Regido por el planeta Venus –Diosa del amor-, a Tauro se le asocia la fecundidad, la abundancia, y desde la segunda casa del Zodiaco, tras el impulso de Aries (primera casa), viene a concretar, aterrizar y materializar las ideas.  Es por eso que se potencia la capacidad productiva y de concreción de todo lo que nos hemos propuesto.

Tauro es el signo de la fuerza y el poder, y esto define a quienes lo tienen de regente. Si conoces alguno, sabrás que además de persistentes, y hasta testarudos, son decididos, fieles defensores de sus creencias, e incondicionales con sus afectos. Esta es la energía que debemos aprovechar del tránsito del Sol en Tauro, la de la constancia, la persuasión y la paciencia para conseguir todo lo que se quiere.

Recuerda que Tauro viene con ese crecimiento espiritual sin importar las circunstancias, por lo que puedes aprovechar estos días para trabajar la oscuridad que hay en tu vida y transformarla en luz para tu beneficio. Tiempos difíciles y retadores pero gratificantes.

Tauro es un signo de tierra y la naturaleza terrestre propicia un carácter realista, sensato, prudente y con mucho sentido común. Los nativos de este signo suelen ser racionales y con un acusado sentido práctico.

Persiguen la estabilidad y la seguridad material y la atraen. Por encima de todo, necesitan bienes materiales y el dinero, que les abre la puerta a los goces, placeres y confort que tanto desean. Es por ello, que la palabra clave de TAURO es YO TENGO.

Sin embargo, su realismo natural les hace ser conscientes de que es preciso trabajar y esforzarse duramente para obtener todo eso, por lo que pueden llegar a ser verdaderamente austeros en la consecuencia de sus ambiciones.

Tauro también es un signo fijo, lo que apunta a una de las características más conocidas del mismo: la obstinación o la testarudez. Una vez que deciden emprender un camino ya no se apartarán de él. Siempre terminan aquello que comienzan, y ésa es una de las mayores razones del éxito de estos nativos, pero lo mismo puede ser también la causa de su perdición si se obstinan en seguir caminos equivocados.

Este signo se encuentra bajo la regencia de Venus, el planeta de la belleza y del amor, pero se trata de una Venus profundamente «terrestre». A pesar de su naturaleza terrenal son también diplomáticos y refinados y los atrae la belleza, el lujo y el arte en todas sus manifestaciones.

Para Tauro lo importante no es conquistar sino conservar. Su obsesión es asentar lo conseguido sobre firmes raíces. La defensa predomina en ellos sobre el ataque. Son constantes y pacientes en la persecución de sus objetivos, así como diplomáticos, hábiles y persuasivos

Son de carácter flemático o calmado, se dominan mucho y es difícil que pierdan los nervios, pero cuando eso ocurre tienen terribles explosiones de cólera y puede costar mucho aplacarlos.  Representan la exuberancia de la primavera y su poder creador en su pleno apogeo.

Alude a una personalidad hedonista, sensual, oluptuosa, amante de los placeres terrenales en todas sus formas: sexo, comida, confort, refinamiento, etc. Una naturaleza pacífica pero también egoísta y centrada en sus intereses.

Habitualmente su destino es de progresión lenta. Van consiguiendo poco a poco las metas materiales o humanas que se han propuesto, pero una vez que logran alcanzar el éxito, aunque sea tardío, éste suele ser sólido y duradero. La segunda mitad de su vida suele ser mejor que la primera. Soportan con paciencia las dificultades.